jueves, 31 de agosto de 2006

El beso

"El acto en sí mismo nunca varía, pero cada beso lleva consigo su propio significado. Puede transmitir la eterna devoción de un marido o el gran arrepentimiento de una mujer; puede simbolizar la creciente preocupación de una madre o la ardiente pasión de un amante; pero signifique lo que signifique cada beso refleja una necesidad básica del ser humano. La necesidad de conectar con otro ser humano es un deseo tan fuerte que siempre resulta asombroso que algunas personas no puedan comprenderlo".

Capítulo 11, Mujeres Desesperadas (2º temporada)

miércoles, 30 de agosto de 2006

aeki

Bienvenido a la República Independiente de tu Casa... me encanta el eslogan de Ikea. Es buenísimo. Realmente te construyes tu propio mundo. un lugar, un universo único donde (se supone) nadie debe molestar. Que será tu cobijo cual caverna de Platón. Todo esto viene porque tengo un catálogo de Ikea en mis manos. Me vuelven loca todos esos aparatejos de decoración, que simplemente nutren las paredes de lo que llamamo "hogar" y mediante los cuales pintamos, coloreamos, tapamos nuestros sentimientos, gustos y miedos.
Me iría a vivir sola sólo para poder decorarme mi propio piso. Para sentir esa sensación de libertad, de soledad. Escuchar el silencio sólo roto por el ruido de tu cerebro. Todo esto para decir que el día en que tenga un sitio donde instalarme, creo que terminaré viviendo en el rellano de tantas cosas que meteré. Si mi habitación ya parece una caverna donde tienes que ir salteando cosas, rebuscar entre estanterías y demás...
Rebuscaré entre mis pensamientos. Para ello me compré el otro día una estantería en Leroy Merlin (lo más parecido a Ikea en Valencia). A ver si ordeno algo de mi vida. Si no son mis pensamiento al menos que sea alguna parte de mis pertenencias más vanales.
Actualización 1/Sept/06 a medianoche: por obra y arte del señor que mueve los hilos de Internet, ahora puedo ver los vídeos de YouTube, así que este es un anuncio algo perverso, aunque el verdadero se aloja aquí. Lo estaría oyendo todo el día.

miércoles, 23 de agosto de 2006

Conclusiones a media tarde

Conclusión del 23 de Agosto de 2006, a las 19 horas en una silla remota de la biblioteca de Torrente:
"Menuda cagada más grande (en sentio figurado) y menuda follada (en sentido académico)".
Tan sólo necesitaba decirlo, escribirlo. El primer examen lo tengo el día 7 de Septiembre y veo que no llego. Empecé a principios de Agosto pero de nada me ha servido pues dejé de estudiar durante dos semanas entre visitas familiares y viajes. Para el siguiente examen tengo una semana (es el 14 de Septiembre) que espero me cunda (espero no, necesito que me cunda). Me siento algo estúpida dejándo pasar la oportunidad de quitarme estos créditos de encima, pero es lo que pasa siempre: te propones muchas cosas al comienzo de un periódo y después todo se va al garete.
En fin... pues eso, que esta noche trastearé con mi nuevo ordenador y mañana será otro día, en el que espero que el temario de Renoir y Rosellini me entre mejor que hoy.

martes, 22 de agosto de 2006

Me cuesta tanto olvidarte

Entre el cielo y suelo hay algo
con tendencia a quedarse calvo
de tanto recordar
y ese algo que soy yo mismo
es un cuadro de bifrontismo que
sólo da una faz
la cara vista es un anuncio de Signal
la cara oculta es la resulta
de mi idea genial de echarte
me cuesta tanto olvidarte
me cuesta tanto olvidarte
me cuesta tanto
olvidar quince mil encantos
es mucha sensatez
y nosé si seré sensato
lo que se es que me cuesta un rato
hacer cosas sin querer
y aunque fui yo quien decidió queya no mas
y no me canse de jurarte que no habrá
segunda parte
me cuesta tanto olvidarte
me cuesta tanto olvidarte
me cuesta tanto ... (bis) [piano]

viernes, 18 de agosto de 2006

Conversaciones con Billy Wilder

Me ha costado leerlo. Exactamente un par de meses desde que empecé a leérmelo, pero lo leía poquito a poco, sin perder ningún detalle. Era una pena acabarlo pero algún día tenía que hacerlo. Cameron Crowe transcribe y crea este libro a raíz de una larga entrevista que finalmente se convirtió casi en coloquio, donde el afamado director, guionista, creador y mi director preferido (junto a Woody Allen), Billy Wilder recuerda vivamente sus comienzos en la meca del cine.
Cuenta cómo empezó de negro, cómo paso después a firmar sus propios escritos, cómo se gana el pan con el trabajo de periodista sin haber cursado ningún título, sólo el de saber escribir. No tengo palabras para describir el libro, pero si aprecias el trabajo de Wilder y su persona, el libro te encantará. Cuenta toda clase de detalles sobre su vida, la influencia que tuvo Lubitsch sobre él, anécdotas de rodajes. Un libro intersante, acompañado por fotografías del director y de sus películas. Un libro donde el final debería ser la muerte de Wilder, pero no ocurre así.
Editado dos años antes del fallecimiento de Wilder, el libro mantiene siempre la jobialidad del director austriáco, al tiempo que nos enseña que, incluso con 90 y muchos años, Billy Wilder seguía siendo el magnífico artista que siempre fue, sin perder nunca el humor que lo caracterizó.
En fin, un libro precioso que deja frases míticas como la que contestó ante la petición de Cameron de cuál sería el mensaje que enviaría a la gente que leyera la entrevista, mucho después de que ellos estuvieran muertos: "Sí, es una pregunta difícil. Quizá tenga que enviarle un telegrama con la respuesta. (Risas). Yo no estoy plantado en un observatorio. Creo que vivimos un época muy importante e interesante. Creo que nos acostumbraremos a los nuevos inventos, pero que no van a ser tan interesantes como parece. Si centráramos nuestra atención en las Naciones Unidas y trabajásemos con la perspectiva de que no haya más guerras, no más guerras atómicas, no más gas venenoso..., eso sería mucho más importante que esa cosa [de Marte]. Pero estamos muy lejos de tener garantizada la paz en este mundo. Y uno no suele disponer más que de setenta años para hacer algo. Luego llega la siguiente generación. No sé. Tengo mucha curiosidad. Eso es lo que me mantiene vivo, la curiosidad."

Crónica de una muerte anunciada

Un día he tardado en leer esta obra. Una de las novelas más célebres de Gabriel García Márquez. Leía la historia de Santiago Nasar acelerada, porque la misma historia parecía que sucedía así. Desde el primero momento los lectores sabemos que el protagonista va a morir. Es más, todo el pueblo lo sabe, tú mismo lo sabes, pero Santiago ni lo intuye. Fabulosa crónica de cómo transcurre las últimas horas de este 'muerto viviente', las impresiones de lo sucedido de los vecinos, de los autores del crímen. Todo bien cosido para que no se escurra nada de esta historia. El mejor remedio para el aburrimiento y, además, saboreas el gusto de leer la prosa hispana de uno de los mejores escritores contemporáneos. Si la edición que tienes entre tus manos fue publicada en 1984, con sus hojas ya amarillentas y su olor a "he vivido mucho", mejor que mejor.