viernes, 31 de marzo de 2006

Día 2: viaje friki a Copenhaguen

Después de hacer turnos para ir al baño (9 personas para un solo baño) pudimos salir de casa. No cogimos las bicis porque empézó a llover (cosa insólita aquí, jajajaja) y fuimos andando poquito a poco.
Llegamos hasta la calle peatonal más larga del mundo (discutíamos sobre ello porque decían que en Francia también había una). Aina robó un par de postales y seguimos nuestra marcha hasta Robert's Cafe. Impresionante. Con luz tenue pudimos sacar nuestros sandwiches y beber café durante más de 3 horas. Cuando vimos que la tarde se nos venía encima decidimos hacer la mudanza.
La mudanza consistía en que tres de nosotros se quedaban en casa del anfitrión porque no caben más y el casero nos podía tirar. Los 5 restantes tuvimos que quedarnos en casa de los griegos. Esta casa consiste en habitaciones amplias,cocina alargada, ventanas impresionantes peroooo... cocina diminuta. Diminuta en el sentido que sentado en el water puedes hacer tus necesidades, lavarte los dientes y ducharte... todo a la vez. Es minúsculo y no es un mito.
Uno de los griegos se parecía al del anuncio del 11811... alias 'el bolao'. Bueno, tengo que irme, porque el ordenador está más solicitado que el baño, que ya es decir.

Hasta mañana

jueves, 30 de marzo de 2006

Día 1: viaje friki a Copenhaguen

Ahora mismo escribo en una habitacion habitada por maletas, 8 personas, una cama, una mesa y una ventana. Tuvimos que estar en silencio toda la noche por miedo a que el casero (compañero de piso del anfitrión) se despertara y nos tirara a todos a la calle.
Todo empezó con un vuelo Valencia-Berlín junto a Nacho Vidal. Impresionante. El vuelo no fue para menos, pues nuestro querido Álex estuvo meditando con Ana Moya y conmigo sobre la depilación de ciertas partes masculinas que no se atrevía a depilar. Más de media hora de conversación, con detalles incluidos,corquis y demás. Las probes niñas de 2º ESO que iban en el asiento de delante estarían demasiado perturbadas y flipadas (o quizás no, las nuevas generaciones van que vuelan).
Llegada a Berlín, recogida de maletas que tardan un huevo en salir. Las pillamos y nos vamos a comer. Nos encontramos que nuestra compañía, Easyjet tiene el color naranja como marca propia y todo el estante de facturación es de un color naranja chillón. Descubrimos las nuevas teconologías de los alemanes para sacar las tarjetas de embarque y arreando que es gerundio.
Vuelo Berlín-Copenhaguen. Todos dormidos en el avión. Llegamos tras una hora de vuelo y nos abrazamos a nuestro anfitrión, Alberto, después de andar y andar por pasillos para recoger las maletas. La de Miki casi se queda en Berlín por sobrepeso (pobrecita, ahora hasta marginan a las maletas con sobrepeso).
Ainara (Milano-London-Copenhaguen) estaba esperándonos con Alberto. Falt solo Aina por aparecer. Nos enteramos de que ha perdido el vuelo en Londos desde Roma. Llegará un poco más tarde.
No pasa nada. Nos sentamos encima de las maletas, sacamos el fuet, el chorizo, el jamón serrano y el york y a jalar con pan de bimbo (somos más de pueblo que las bellotas con boina). Esperamos durante algunas horas 7 personajes tirados en el aeropuerto.
Una vez estamos los 8 amigos juntos, nos dirijimos a casa de Alberto. En nuestro camino nos encontramos con estaciones de metro sin conductor, rollo peli futurista, bicis tiradas por las calles y amontonadas... En fin, que dejamos las maletas en la casa y nos volvimos a bajar a la calle. Pillamos las bicis que nos habían conseguido pero robamos dos más que nos faltaban (creo). Entre medias nos pilla la poli dos veces por no llevar luces, bebemos limoncello mientras vamos en bici, silvamos la canción de Verano Azul (muy acorde con la ocasión) y nos relacionamos con más Erasmus (entre ellos unos catalanes).
Genial, para repetir...

viernes, 24 de marzo de 2006

Corte de pelo

Bueno, el blog ha 'digievolucionado' o como se diga/escriba (una confiesa no haber visto jamás los Pokémon las veces suficientes como para aprender esa palabra... nada más ver que aparecía 'eso' en la pequeña pantalla cambiaba de cana. Nunca los entendí, ni nunca los entenderé).
Nunca me gustó el rosa. Podía soportarlo en ocasiones especiales, pero no por mucho rato. No sé cómo pude ponerme la plantilla del blog en ese color, ni comprendo cómo pude aguantar tanto tiempo sin que los ojos se me salieran de sus órbitas por ello.
De esta manera (y debido a la mala combinación del rosa con otros colores para un blog), decidí darle un giro de 180º o más a ésta bitácora o rinconcito mío. Poco a poco iré modificando los colores de las letras y los links pero ahora mismo tengo un sueño que me parte en dos, así que me parece que este fin de semana el blog se quedará un poco apartado.
Pues eso Pedrajas, que no eres el único que cambia de blog (u/o plantilla:P

lunes, 13 de marzo de 2006

Rocco

Después de tres años de intentar tener un hijo mi novio y yo, al fin lo conseguimos. Supongo que no era como nosotros esperábamos pero algo es algo. No por ser distinto vamos a discriminarlo, no creen?
Pero es muy mono, todo hay que decirlo. Es mono cuando se embota los colmillos y sus uñas e intenta asesinar al muñeco de nieve que tiene por el suelo y con el que un día nos deleitará decorándonos el piso con trozos del mismo. Es mono cuando intenta deborar el hueso que le regaló su abuela paterna, cuando escala por los sofás para ponerse a tu lado e incluso cuando sigue escalando cual montañero en el Everest y se duerme entre tu cogote y el respaldo del sofá.
Lo queremos aunque muerda y gruña contra los camales de nuestros pantalones, porque cuando llegas al piso y una cosita que no pesa más de 1 kilo y 800 gramos, que no levanta dos palmos del suelo sale corriendo pasillo a través, con sus orejillas golpeándole la cara y con el rabillo moviéndose ansiosamente... la verdad es que se te cae la baba.
Pues eso, que al entrar al piso tengan cuidado de no matarnos de un pisotón a nuestro primogénito, que es chiquitajo pero matón :P
PD: absténgase de entrar en el piso aquellos que calcen pantalones con pata de elefante o sandalias con dedos al aire.

domingo, 12 de marzo de 2006

Confesión

"Tu olor el incontrovertible y brutal olor del amor- permanece intacto mientras los besos se volatilizan en su propio júbilo y la humedad se hace una con la piel. Tu olor, en cambio, impregna hasta la médula. Hasta ese lugar recóndito donde el deseo anida y obliga a dejar intactos los platos del almuerzo y a danzar de nuevo hacia la cama, muertos de hambre de amor. "
Juan Gustavo Cobo Borda

sábado, 11 de marzo de 2006

Desayuno con diamantes

Escena última. Paul y Holly se meten en un taxi al salir ella de la Policía.
PAUL: En tu ausencia, he ido a robar a tu casa. (dirigiéndose al taxista) Al hotel Clayton, entre la calle 84 y Madison. (de nuevo a Holly) A Oj le parece bien que te escondas durante una temporada. Tengo casi todas tu cosas aquí, incluido el gato. Supongo que está bien. Sí...
HOLLY: Hola gato. Pobre infeliz sin nombre. (poniéndose el vestido) Escucha cariño, ¿encontraste el billete de avión?
PAUL: Está aquí. Lo reembolsarán.
HOLLY: ¿Qué lo reembolsarán? Bromeas. ¿Qué hora es?
PAUL: Poco más de las diez.
HOLLY: Bien. Al aeropuerto, por favor chófer.
PAUL: No haga caso (al taxista). No puedes hacer eso.
HOLLY: ¿Por qué? ¿Por qué no?
PAUL: ¿No lo entiendes? Estás procesada. Si te cogen fugándote bajo fianza, te encerrarán y tirarán la llave.
HOLLY: No seas ridículo, cariño. Pasado mañana estaré casada con el futuro presidente de Brasil, y eso me dará inmunidad diplomática o algo parecido.
PAUL: Yo no me fiaría.
HOLLY: ¿Qué pasa?
PAUL: Tengo… tengo un mensaje para ti.
HOLLY: Oh, ya, comprendo. ¿Lo trajo personalmente o lo encontraste metido por debajo de la puerta?
PAUL: Lo último.
HOLLY: Dame el bolso, ¿quieres, cariño? No se puede leer una cosa así sin llevar los labios pintados. Léemelo, ¿quieres? Creo que yo no podría hacerlo.
PAUL: ¿Estás segura de ello?
HOLLY: Mmmm…
PAUL: Muy bien. “Mi querida chiquita, te he querido sabiendo que no eras como las demás. Pero comprende mi reacción, al descubrir de forma tan brutal y pública que difieres de mi concepto de mujer de la cual un hombre de mi posición va a contraer matrimonio. Me apena mucho la desgracia de tu actual circunstancia y no me veo capaz de añadir con mis reproches, mayor pena a tu situación. Así que creo que serás capaz de perdonarme. Comprende que mi situación es muy comprometida: tengo que proteger a mi familia y mi nombre, y soy un cobarde cuando se trata de defender a ambos. Olvídate pequeña, y que tengas mucha suerte. José”
HOLLY: Vaya.
PAUL: Por lo menos ha sido sincero. Es conmovedor.
HOLLY: ¿Conmovedor? Ese presumido imbécil...
PAUL: Ya lo has oído, dice que es un cobarde
HOLLY: Pues claro cariño, es un canalla, ni siquiera un súper canalla No es más que un ratoncito asustado. Pero ... sniff, ¡caracoles! ¡Maldita sea!
PAUL: Por favor … Bueno, se acabó lo de Sudamérica. En realidad nunca pensé que llegaras a ser la reina del Pan de Azúcar. (dirigiéndose al taxista) Al hotel Clayton.
HOLLY: Al aeropuerto.
PAUL: ¿Qué?
HOLLY: El avión sale a las doce y quiero estar abordo.
PAUL: Holly, no puedes.
HOLLY: ¿Y por qué no? No pienso perseguir a José si es eso lo que piensas. Oh, no. Por lo que a mí se refiere, no significa nada en mi vida. Es sólo porque no quiero dejar perder un billete de avión. Además, no he estado nunca en Brasil. (mirada de Paul, incrédulo) Por favor cariño, te ruego que no me mires así. Me voy, y eso es todo. Lo único que quieren de mí, son mis servicios como testigo del caso contra Sally. Nadie tiene intención de procesarme. En primer lugar, porque no he hecho nada, y en segundo, porque estoy cansada de esta ciudad. Hay ciertos tonos de luz del alumbrado que estropean el cutis. No podría ir a ninguna parte sin que se fijaran en mí. ¿Sabes lo que puedes hacer, cariño? Cuando regreses a la ciudad, quiero que llames al New York Times o al que sea. Quiero que me manden una lista de los 50 hombres más ricos de Brasil. ¡Los 50 más ricos!
PAUL: Holly, no permitiré que hagas esto.
HOLLY: ¿Por qué no vas a permitirlo?
PAUL: Holly, estoy enamorado de ti.
HOLLY: ¿Y qué?
PAUL: ¿Cómo que “y qué”? Qué preguntas haces. Te quiero y me perteneces.
HOLLY: No, las personas no pertenecen a nadie.
PAUL: Claro que sí.
HOLLY: No dejaré que nadie me ponga en una jaula.
PAUL: Yo no quiero ponerte en una jaula, sólo quererte.
HOLLY: Es lo mismo.
PAUL: No, no lo es. Holly...
HOLLY: No soy Holly. Ni siquiera Lula Mae. No sé quien soy. Soy como este gato: somos un par de infelices, sin nombre. No pertenecemos a nadie y nadie nos pertenece. Ni siquiera el uno al otro. (dirigiéndose al taxista) Pare el coche. (Abriendo la puerta del taxi y soltando al gato) Bueno, aquí está bien. Este debe de ser un lugar adecuado para un animal fuerte como tú. Cubos de basura y muchas ratas. Corre, he dicho que te marches. Ande, vámonos.
(Mirada incrédula de Paul mientras Holly se enciende un cigarrilo)
PAUL: Chófer, pare aquí un momento. (Desde la puerta del taxi) ¿Sabes lo que te pasa? No tienes valor. Tienes miedo, miedo de enfrentarse contigo misma, y decir “está bien, la vida es una realidad. Las personas se pertenecen unas a otras porque es la única forma de conseguir la verdadera felicidad”. Tú te consideras un espíritu libre, un ser salvaje, y te asusta la idea de que alguien te pueda meter en una jaula. Bueno nena, ya estás en una jaula. Tú misma la has construido, y en ella seguirás vayas donde vayas porque no importa donde huyas, siempre andarás tropenzado contigo misma. (Sacándose el anillo del bolsillo) Toma, hace tiempo que lo llevaba encima. Ya no me hace falta.
PAUL: Gato! Hey, gato!
HOLLY: Yo… ¿dónde está el gato?
PAUL: No lo sé
HOLLY: Gato… gato, gato, gato… oh, gato (miau) Gato!, oh gato!

viernes, 10 de marzo de 2006

La vida es sueño

Entiendo ahora (esta noche) por qué me refugio en mi cama. Este elemento nada tiene que ver con ser aparentemente un elemento decorativo o, quizá, que concierne a nuestra salud; sino que es mi propia cabaña donde me refugio ante los peligros de la vida.
Estando enfadada o sin estarlo, siempre acabo acurrucada en un rinconcito de mi cama, con los brazos rodeando el almohadón, o en su defecto las piernas, cual pulpo intentando agarrarse a la vida marina.
Y es que no hay mejor lugar para las penas que la cama. Aprecio bastante cómo me siento cuando, atormentada de la vida (o a veces harta de la misma), intento olvidar tantas penas como sea posible en ella. Me sumerjo en las sábanas e intento introducirme en la historia del libro que me esté leyendo en ese momento, porque una cama sin libro que llevarse a la mente es como una hormiga sin comida que llevarse al hormiguero.
Por eso y por muchas cosas más, uno de los mayores placeres es taparse con la manta, apoyar la cabeza en la almohada, apagar las luces y escuchar de fondo un solo de piano. Es entonces cuando piensas que sí valen la pena perder 8 horas (de media) durmiendo cada día.

martes, 7 de marzo de 2006

Yo quisiera ser civilizado como los animales

Yo quisiera poder aplacar una fiera terrible / Yo quisiera poder transformar tanta cosa imposible / Yo quisiera decir tantas cosas que pudieran hacerme sentir bien conmigo / Yo quisiera poder abrazar mi mayor enemigo.
Yo quisiera no ver tantas nubes oscuras arriba / Navegar sin hallar tantas manchas de aceite en los mares / Y ballenas desapareciendo por falta de escrúpulos comerciales / Yo quisiera ser civilizado como los animales.
La la la la la..................... Yo quisiera ser civilizado como los animales.
Yo quisiera no ver tanto verde en la tierra muriendo / Y en las aguas de ríos los peces desapareciendo / Yo quisiera gritar que ese tal oro negro no es mas que un negro veneno / Ya sabemos que por todo eso vivimos ya menos.
Yo no puedo aceptar ciertas cosas que ya no comprendo / El comercio de armas de guerra, de muertes viviendo / Yo quisiera hablar de alegría en vez de tristeza mas no soy capaz / Yo quisiera ser civilizado como los animales.
La la la la la.....................Yo quisiera ser civilizado como los animales.
Yo no estoy contra el progreso si existiera un buen consenso / Errores no corrigen otros, eso es lo que pienso / Yo no estoy contra el progreso si existiera un buen consenso / Errores no corrigen otros, eso es lo que pienso.
El Progreso, Roberto Carlos

mala persona

Soy una mala persona que se refugia en la música heavy para evadirse. Soy una mala persona que no sabe enfrentarse a sus problemas. Soy una...