lunes, 12 de marzo de 2007

diario de un zoefero

A mis amigables amigos, mis más preciado tesoro. No quiero veros tristes, no soporto veros apenados. Esta semana ya han sido varios los momentos en los que me habéis hecho reflexionar sobre nuestro adentros, nuestros sentimientos y sobre nuestra persona en general.
Una de las cosa más importantes que he aprendido en mi poco recorrido por esta vida es que, quedándose uno sentado y lamentándose, llorando, no ganas nada. No solucionas nada y, lo que es peor, eso no te hace sentir mejor (que sería nuestro objetivo). Lo único que mueve el mundo es la energía que cada uno pueda desprender y todos, absolutamente todos, tenemos algo de energía dentro de nosotros. No vale la pena lamentarse y saber por qué uno se lamenta si vas a seguir igual, sin coger el toro por los cuernos y hacerle frente, sin haber probado a solucionar el problema con nada. Y si lo has probado y, aun así, sigues sin ver la luz, sin sentirte bien, es que no se ha dado con el remedio adecuado y debes seguir buscando. Cito textualmente de una de las conversaciones: "Quiero que salga de tu más adentro esa poquita energía que tenemos todos que se llama voluntad, combinado con otra poquita energía llamada valentía".
Una joya de mi tesoro preguntóme anoche en qué penasaba yo cuando me sentía floja de moral... cito textualmente mi respuesta:
"Pues me lamento, y mucho. Me siento muy mal. No quiero ver a nadie, sólo estar sola. Tumbarme en la cama o andar sola. Todo sola. Y de repente, algo me hace cambiar. Al cabo de los días, de ver que estoy haciendo el inútil, que realmente no vale de nada lamentarse, que a nadie le doy pena y que nadie, salvo yo, me va a ayudar a salir del embrollo en el que me haya metido. Entonces saco mi poquito de valentía que tengo en mis adentros y la hago relucir. Eso, y un poquito de mi racionalidad. Pero cuando estoy floja pienso que soy lo peor, la escoria de todo. Que todo me pasa a mí o que lo que me ha ocurrido es lo peor del mundo. Pero no, no es lo peor, sino sólo una parte. Nada es para siempre (como decía la serie) y no todo es tan gravemente malo."
Espero poder servir de algo.





5 comentarios:

Anónimo dijo...

Dos palabras: tiempo y distancia.
La tristeza no se va de un día para otro. Una cosa es como te muestres de cara a la galería y otra como te sientas. Los sentimientos no se pueden controlar ni manipular a tu antojo.

Little Padawan dijo...

En efecto, no puedes manipularlos pero sí encauzarlos. Todo es ponerse ;)

Pd: y por supuesto, el tiempo lo curo todo. A mí siempre me han dicho que "ya lloverá" o "deja que llueva" (non mi ricordo)

Anónimo dijo...

Sabes que todo va bien, que nada anda tan mal, que amanece todos los días, y que no llueve eternamente...

Gracias miles Zoe por estar siempre tan cerca!

Little Padawan dijo...

Se me ponen (...) rojitas las orejas (y mejillas)

Anónimo dijo...

¿Quién está triste? A mí me ha pasado muchas veces que intento dejar de estar triste o de que algo me afecte y sólo deja de hacerlo cuando ya he asumido y reconocido que me duele. Entonces va desapareciendo. Supongo que es importante ser honesto con uno mismo como primer paso para dejar de estar mal. Aunque todo esto es un poco abstrácto, lo que sirve para uno puede no servir para todo el mundo.

Será una cuestión de actitud!

Un beso padawan.

mala persona

Soy una mala persona que se refugia en la música heavy para evadirse. Soy una mala persona que no sabe enfrentarse a sus problemas. Soy una...